Obama y Netanyahu conversarán sobre proceso de paz

AP Washington 03-03-2014 08:05

Se reunirán este lunes en la Casa Blanca.

Con el objetivo de mantener con vida dos delicados esfuerzos diplomáticos, el presidente de Estados Unidos Barack Obama pedirá al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu que se avance en las conversaciones de paz con los palestinos, mientras trata de contener las sospechas de Israel sobre su acuerdo nuclear con Irán.

Obama y Netanyahu se reunirán este lunes en la Casa Blanca cuando ambas negociaciones se encuentran en una coyuntura clave. Estados Unidos y sus aliados internacionales están en medio de una ronda de conversaciones con Irán con la meta de alcanzar un acuerdo nuclear de largo plazo. El plazo para alcanzar un convenio de paz entre Irán y los palestinos se acerca a su vencimiento con pocas señales visibles de progreso.

Aaron David Miller, quien desde hace muchos años asesora sobre Medio Oriente a presidentes de ambos partidos, señaló que la tensión causada por las negociaciones sobre el programa nuclear de Irán probablemente obligarán a Obama a hilar fino mientras presiona a Netanyahu para que se llegue a un arreglo con los palestinos.

Aunque ha habido avances en ambos asuntos, los pronósticos de que se logren acuerdos en ambos temas son reducidos. Poco antes de partir a Washington, Netanyahu prometió "mantenerse firme" sobre los intereses de Israel ante la eventualidad de recibir presión internacional para que haga concesiones a los palestinos.

Para Obama, la posibilidad de lograr un acuerdo nuclear con Irán frecuentemente ha desplazado la meta de alcanzar la paz entre israelíes y palestinos. Tras un fallido intento de iniciar un proceso de negociación entre las partes durante su primer periodo en la presidencia, el presidente ha dejado que John Kerry, su secretario de Estado, se haga cargo de ese tema.

No obstante, la mención directa a Netanyahu que Obama hizo esta semana, así como una reunión que tendrá por separado con el líder de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, indica que la Casa Blanca cree que es necesaria la participación del presidente antes de que se cumpla el plazo de abril.